La gran anarquía que están generando los llamados bachaqueros, mayoritariamente mujeres, a las puertas de los establecimientos comerciales de Tucacas, puede concluir en una tragedia con saldo de muertes, si las autoridades policiales no ponen freno a ese foco de violencia en que se han convertido las colas para comprar alimentos.
Así lo afirmó el dirigente comunal de la parroquia Boca de Aroa, Pablo Granadillo, quien hizo un llamado directo a la Guardia Nacional y a las policías nacional y regional "para que impidan que la actuación delictiva de las bachaqueras haya pasado al plano de las agresiones físicas en su afán de colearse y mantener los primeros lugares de las filas para comprar".
Granadillo agregó que, el pasado fin de semana, fue testigo de cómo unas bachaqueras agredieron a damas de la comunidad, de manera violenta, incluso sacando a relucir armas blancas.
"Nadie lo entiende. Si hay un piquete policial en las colas, a las afueras de Pdval o Farmatodo, ¿por qué esos funcionarios permiten que las bachaqueras, todos los días, sean las primeras en la fila, que logran comprar de todo en desmedro de las amas de casa, de las embarazadas y de las personas de la tercera edad?", preguntó Granadillo.
METAN FRENO
Más allá —prosiguió— ¿por qué ese piquete policial no hace nada para impedir que bachaqueras agredan a golpes, patadas y a navajazos, a gente que está desde las 4:00 de la madrugada en una cola para poder adquirir los alimentos del día o de la semana?
Ese bochinche violento viene ocurriendo hace más de un mes y los organismos de seguridad no han hecho nada para impedirlo.
Granadillo advirtió que, "si no se mete en cintura a los bachaqueros, puede ocurrir una tragedia, hasta con saldo de muertos, porque una multitud, un tumulto en medio de una espiral de violencia, genera una situación impredecible".
Fuente: lamanana.com.ve
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